No confío lo suficiente en mi, y me gusta.
Prefiero confiar también en algo superior a mí, aunque no sepa con certeza de qué se trata. Me siento bien haciéndolo.
No sé si es o no correcto, pero lo cierto es que me produce paz y tranquilidad la sensación de pensar que hay algo más inteligente que yo y que sabe qué es lo mejor para mí.
Creo en mí, me reconozco, y es por eso que miro en mi interior esa parte esencial de mi “Alma” que no pertenece a este cuerpo y que, de alguna forma, se ha posado en él para experimentar esta vida, cuyo propósito no sabría definir ni explicar.
Ahora solo busco descanso en la providencia (estoy cansado de luchar contra todo y contra mí mismo), y espero a que me dé lo que realmente crea conveniente, y como siempre, lo acepto.
No quiero solo pensarlo, sino también poner en práctica el hecho de dejarme en sus manos. Ser plenamente consciente de ello y saber entender qué necesita de mí, y confiar en que lograré dárselo en total coherencia.
Todo lo que le dé será lo que yo reciba.
Decido pensar que hay algo mayor de lo que formo parte y de lo que estoy aprendiendo.
De dónde vengo y a dónde quiero volver, mientras vivo esta experiencia de la vida, llena de enseñanzas que me es imposible abarcar en su totalidad.
“Creo en mí lo suficiente como para darme cuenta de que no creo lo suficiente en mí.”
Me gusta pensar que no confío lo suficiente en mí porque me deja un mundo de posibilidades para seguir aprendiendo de eso a lo cual yo llamo Providencia y que, posiblemente, tú llames Dios o de cualquier otra forma.
Si dejo la puerta abierta, siempre cabe la posibilidad de que alguien se asome y pueda dejarlo entrar. Si por el contrario, la cierro, ese alguien deberá aporrear la puerta y utilizar cierta violencia sobre ella para que yo le abra. Entiéndase la metáfora.
Creer en mí me supone saber hasta dónde puedo dar (aun sabiendo que me puedo equivocar). Confiar solamente en mí sería estar completamente seguro de que no voy a fallar, y eso, amigos, es imposible de acertar, e incluso de aceptar.
PD: Así es como me veo hoy, mientras reflexiono y escribo esto para aclararte las cosas sobre mí.
Afortunadamente, el tiempo me hará cambiar.
Conclusión.
¿Crees en ti?
¿Eres capaz de confiar en ti?
¿Realmente, en qué crees?
¿Hasta dónde crees que puedes dar?
Déjame tu opinión sobre ti, te leo.
Gracias por tu confianza. ¡¡Abrazote ARRRRepretaO!!
Hola! Buena lectura.
Siempre con ganas de mi.
Sí creo en mi, de hecho hoy por hoy mucho de lo que he conseguido es por tener esa certeza.
Confiar por supuesto, que surjan inconvenientes que lo trastoquen todo es inevitable, pero de nuevo vuelvo a confiar en que sabré sacarlo adelante.
¿Qué creo? En qué la disciplina es la herramienta fundamental para conseguir todo lo que te propongas.
Siempre intento dar un 80%, reservándome el 20% para la sorpresa. Pero siempre intentas darlo todo para conseguir lo mejor.
¿Qué habrá que no sepas ya de mí?
Un fuerte abrazo.
Me alegra leer eso. Y sí eres un tipo muy disciplinado, y eso te favorece. Aunque hay veces que creo que nunca tienes suficiente. 😉😂